Todos hemos ahorrado algo en la vida, a todos nos gusta ver la cartilla del banco con saldo positivo (nada de saldo negativo o números rojos).
En clave cristiana, Jesús nos habla hoy de algo parecido...
Es como si tuviéramos que jugar un partido, el más importante, el de la vida. A ningún equipo le gusta que le metan goles, porque lo importante en un partido no es perder, ni siquiera participar... lo importante es ganar...
Pues lo importante en la vida es vivirla, y vivirla amando ( el egoísmo, la soberbia, la avaricia, el orgullo, el pecado... son los goles que nos meten )... Los actos buenos, el amor, las buenas obras, son los goles que metemos... y al final, lo que contará será el saldo positivo, el bien que hayamos hecho, el amor que hayamos ofrecido como resultado positivo de nuestra vida...
Jesús nos enseña lo que es y cómo es el AMOR.
1) Gratuíto, sin intereses, sin razones, puro regalo, que no es pago a nuestros méritos, sino puro don.
2) Generoso, que lo da todo, que se da del todo y que se da a todos...
3) Incondicional, que ama sin condiciones. Un amor que ama por encima de nuestras cualidades y comportamientos.
4) Sin límite, porque es universal y eterno. No tiene barreras y no lo destruye ni la muerte.
Jesús nos enseña que Dios ni sabe, ni puede, ni quiere hacer otra cosa más que AMAR... Ojalá nosotros no supiéramos, no pudiéramos, no quisiéramos hacer otra cosa más que AMAR...
Esforcémonos en ganar por goleada de Amor, el partido de nuestra vida...
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